miércoles, 12 de enero de 2011

Obra Maestra.

Suelta la idea de llegar a ser alguien, porque ya eres una obra maestra. No puedes ser mejorado. Sólo tienes que llegar a él, conocerlo, realizarlo. Dios mismo te ha creado; no puedes ser mejorado.
Empezar a trabajar en este 2011 con la claridad de que somos verdaderas obras maestras creadas para manifestar nuestra belleza y grandeza en los pequeños detalles, en la cotidianidad.

Muchas veces nos esforzamos y sacrificamos por seguir lo que hemos denominado como proyectos ambiciosos y grandes. Siempre que estemos claros que cualquier cosa que hagamos es tan solo un medio y no un fin en si mismo, seremos capaces de actuar con aceptación y amor hacia nosotros mismos y hacia los demás.

El primer reconocimiento que necesitamos para emprender y actuar con confianza y valentía debería surgir de nosotros mismos. Cuando yo me reconozco a mi misma como un ser humano con todas sus dimensiones, cuando yo me reconozco a mi misma como merecedora de las bendiciones que la vida me entrega, cuando yo me reconozco capaz de dar y cumplir con la misión que me corresponde. Todos los demás empezaran a ver y reconocer en mi, todo lo que yo soy capaz de ver y reconocer.

Iniciemos este periodo de tiempo denominado con el año 2011, reconociendo en primer lugar que somos una obra maestra, que no necesitamos ser mejorados en nuestra esencia, que cada meta, cada cambio que hacemos en nosotros mismos y en nuestro entorno es parte de nuestro aporte como obras maestras de una creación que nos supera a nosotros mismos y que al mismo tiempo nos incluye.

Reconócete como una obra maestra y empieza a trabajar con confianza y constancia en la realización de tus sueños.  Cuando decidas saltar, tu corazón empezara a latir tan rápido que no habrá equivocación respecto a donde se encuentra.

Este será un tiempo de grandes realizaciones, construidas en el día a día.

No hay comentarios.: